Un grupo de investigadores del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Neurodegenerativas (CIBERNED), entidad dependiente del Ministerio de Economía y Competitividad a través del Instituto de Salud Carlos III, y de la Facultad de Biología de la Universidad de Barcelona, estudia los receptores de cannabinoides (CB1y CB2) que podrían ser se usados como nueva diana farmacológica para patologías como dolor crónico, párkinson, trauma cerebral o tumores cerebrales.
Concretamente, la investigación publicada en ‘Journal of Biological Chemistry’, puede ayudar a entender mejor alteraciones donde participa el receptor CB1 y donde sobre todo puede haber un alto componente inflamatorio.
Las sustancias psicoactivas del cannabis actúan interaccionando con unas proteínas de la membrana de las células que son sus receptores CB1 y CB2. De manera natural e independiente de la marihuana, las propias células liberan compuestos que se denominan endocannabinoides y activan a los receptores CB1 y CB para producir una respuesta fisiológica.El receptor de cannabinoides CB1 es uno de los receptores más abundantes en el cerebro y ayuda a regular la locomoción, además de funcionar como diana terapéutica para tratar el dolor, la inflamación, el Párkinson y para paliar algunos efectos secundarios en los enfermos de cáncer. Sin embargo, los receptores de cannabinoides CB2 son muy poco abundantes en el cerebro y su función no está del todo clara. Estos convierten a estos receptores en un polo de interés científico, precisamente por la poca información que existe sobre su funcionamiento.
La existencia y función de los receptores CB2 en las neuronas siempre ha sido controvertida. Esta nueva investigación ofrece ahora dos conclusiones relevantes al respecto: en primer lugar, se confirma la expresión de CB2 como proteína en las neuronas y, en segundo lugar, se pone de manifiesto que los receptores CB2 pueden ser una nueva diana farmacológica para modular el efecto de los cannabinoides a través del receptor CB1, formando heterómeros CB1- CB2 que se expresan en el cerebro.
La misión de CB2 en estos heterómeros es reprimir a los receptores CB1, lo que podría explicar que durante procesos de inflamación los receptores CB2 actuaran de freno de los receptores CB1.
La investigación, señalan, demuestra que es necesario tener en cuenta estos heterómeros para el diseño eficaz de fármacos contra receptores de cannabinoides, ya que estos heterómeros son las verdaderas dianas y muestran propiedades distintas de los receptores individuales.
Publicado en ‘Journal of Biological Chemistry’
Fuente: Europa Press
No hay comentarios:
Publicar un comentario